Entrevista con CERSA-MCI, especialista en instrumentos de medición de alambre y cable

Con cuarenta años de experiencia en el campo de los instrumentos de medición y control, CERSA-MCI es hoy sinónimo de rendimiento y fiabilidad en el campo de los equipos para alambre, cable y fibra óptica.
Para conocer mejor los orígenes de la empresa francesa con sede en Cabriès, el desarrollo de sus productos y su evolución futura, hemos entrevistado recientemente a Eric Nogues, ingeniero comercial de CERSA-MCI.

Hacemos un breve repaso de la historia de CERSA-MCI. ¿Cómo ha evolucionado la empresa desde su creación en 1981?
En 1986 desarrollamos los primeros sensores de difracción láser (LDS) para medición en la línea del diámetro de alambres finos. Eso supuso una verdadera revolución en el mercado, y nos llevó a desarrollar otros accesorios e instrumentos, cada vez más eficaces y adaptados a las necesidades cambiantes de nuestros clientes.

A principios de los noventa, en estrecha colaboración con los productores de fibra óptica, CERSA-MCI creó el primer sensor interferométrico láser rápido para medición de fibra de vidrio (LIS-Glass). El gran éxito de este instrumento nos animó a desarrollar otros dispositivos complementarios: instrumentos de medición de tensión sin contacto (NCTM) y, posteriormente, instrumentos de medición en 5 ejes de fibras recubiertas (CM5). Actualmente, los fabricantes más importantes de fibra óptica para telecomunicaciones de todo el mundo utilizan esta gama de productos, combinada con nuestro software CIM.

Gracias a su gama de dispositivos para alambres, cables y fibra óptica, CERSA-MCI se encuentra actualmente entre los líderes del sector de la metrología, y su marca es sinónimo de rendimiento y fiabilidad.

Si bien el tamaño, la organización interna de CERSA-MCI y el número de instrumentos disponibles han evolucionado considerablemente desde la creación de la empresa, no hemos renunciado a lo que nos caracteriza: la excelencia técnica y la innovación al servicio de nuestros clientes, además de la preocupación por la conservación del medioambiente, un aspecto muy apreciado por nuestro fundador.

¿Por qué han decidido entrar en el mercado de los sistemas de medición y control de alambres y cables?
CERSA-MCI se fundó inicialmente para atender las necesidades de automatización y metrología de industrias de alta tecnología, como la militar y la aeronáutica, pero muy pronto las actividades de la empresa se ampliaron a la producción de alambres y cables. La capacidad de la empresa en los campos de la óptica y la electrónica nos permite ofrecer instrumentos que satisfacen la necesidad de medir diámetros muy pequeños en líneas de producción rápida. Es una combinación esencial que permite mejorar la calidad de los productos fabricados, al tiempo que optimiza la productividad y reduce los residuos.

Nos gustaría saber algo más sobre su gama de equipos especializados en fibra óptica. ¿Cómo se ha posicionado su empresa en este nicho tan dinámico en los últimos años?
CERSA-MCI es sin duda uno de los pioneros del control de la fibra óptica, y experimentó un verdadero despegue a principios de la década del 2000. Los principales fabricantes de fibra del mundo utilizan en sus procesos de fabricación nuestra gama de dispositivos especializados en el control de calidad de la fibra. Estos dispositivos han llegado a convertirse en elementos indispensables para garantizar al 100 % la certificación de la fibra óptica producida. La inversión masiva en I+D en este campo ha permitido a CERSA-MCI posicionarse como líder indiscutible en todo el mundo. Es una marca con una reputación de rendimiento y fiabilidad de la que nos sentimos muy orgullosos.

El reciente auge en la demanda de fibra óptica para atender las necesidades de comunicación, sobre todo tras el periodo de confinamiento provocado por la COVID-19, está reactivando proyectos de creación de fábricas de fibra óptica en todo el planeta. En este contexto, CERSA-MCI reafirma su posición de líder y socio local para acompañar la evolución técnica del sector con dispositivos innovadores.

¿Cuál es el secreto del éxito de CERSA-MCI? ¿Qué estrategia ganadora ha utilizado para consolidar su presencia en el mercado?
Siempre nos hemos distinguido por nuestra experiencia técnica y nuestro liderazgo en innovación para garantizar un nivel constante de alta calidad en nuestros productos. CERSA-MCI ha optado desde el principio por diseñar, montar, ajustar y probar sus instrumentos mediante un equipo altamente calificado, que se localiza en un único centro en Francia. Controlamos las distintas etapas y reducimos al mínimo el uso de subcontratistas. Este sistema representa una gran ventaja para garantizar la fiabilidad de nuestros instrumentos, permitiéndonos prestar un servicio de mantenimiento rápido, eficaz y a un coste moderado. Somos capaces de desarrollar y mantener nuestros instrumentos en buen estado de funcionamiento durante años.
Es una diferencia que nos distingue de la competencia y que nuestros clientes aprecian verdaderamente desde hace muchos años. La proximidad a nuestros clientes es real y tenemos la intención de seguir en esa línea.

¿Podría explicarnos cuál es la estructura de la empresa? ¿Cuántos empleados tiene CERSA-MCI y cómo está organizada?
CERSA-MCI cuenta con más de una veintena de empleados en Francia, además de un centro de asistencia y reparación en China, muy cerca de las fábricas de fibra óptica. Se trata de una pequeña empresa con un ambiente muy familiar y acogedor. Para nosotros es muy importante disfrutar de un entorno de trabajo agradable. Nos organizamos en varios departamentos. En primer lugar está Investigación y Desarrollo, elemento esencial en CERSA-MCI desde sus inicios, donde trabajan nuestros ingenieros para crear soluciones para hoy y, sobre todo, para el futuro.
A continuación, se encuentra el área de producción, donde se desarrolla la actividad de electrónica, mecánica y todo el trabajo de ensamblaje, montaje y ajuste. Es un equipo altamente cualificado que cumple a la perfección los requisitos de calidad establecidos en los pliegos de condiciones. Por último tenemos el departamento administrativo, así como el equipo de ventas y los agentes comerciales que representan a la marca CERSA-MCI en muchos países del mundo.

¿Qué criterios tiene en cuenta para seleccionar a los nuevos miembros de su equipo?
Para formar parte de CERSA-MCI es necesario, por supuesto, poseer un alto nivel de conocimientos en nuestros campos preferidos. Pero eso no es todo. Buscamos candidatos con pasión, afán de superación, autónomos y que, naturalmente, sepan evolucionar en un equipo multidisciplinar. Tenemos una rotación de personal muy baja, lo que demuestra que la gente se siente bien y se identifica con los valores que representa CERSA-MCI.

¿Qué importancia tiene la I+D en CERSA-MCI? ¿Cuáles son sus prioridades en materia de investigación y desarrollo de nuevos productos?
La I+D ha sido una parte esencial de CERSA-MCI desde su fundación. Trabajamos en estrecha colaboración con nuestros clientes para ofrecerles productos que satisfagan sus necesidades y tengan un rendimiento óptimo. ¡Nos crecemos ante los retos técnicos! Nuestro equipo de I+D trabaja constantemente en la evolución de nuestros dispositivos actuales, pero también en los instrumentos del futuro. Eso nos sitúa claramente un paso adelante de buena parte de la competencia, aunque sean mayores que nosotros. La flexibilidad y la capacidad de respuesta son nuestros puntos fuertes.

La necesidad creciente de aumento de la velocidad y de reducción de la latencia obliga a la fibra óptica a evolucionar técnicamente. Junto a los grandes nombres del sector, estamos plenamente implicados para ofrecer las soluciones del futuro.

Y la comercialización de instrumentos realmente innovadores y únicos, como SQM, para la detección continua de defectos superficiales en alambres y tubos, demuestra como CERSA-MCI mantiene un decidido compromiso con el desarrollo de nuevas soluciones para el sector.

Para más información, póngase en contacto con el equipo CERSA-MCI a través de las referencias a lado.